De celos y hombres
crónica de la tercera jornada de la 4ª edición del Festival Internacional de Cinema D’Autor de Barcelona
Primer sold out del festival. Ha llegado con la película catalana Tots els camins de Déu, premiere mundial en el D’A. Mucha expectación y una larga cola también para ver la nueva película de Philippe Garrel protagonizado por su hijo Louis. Por último, cerrábamos la tarde con O homen das multidões. Tres propuestas temáticas muy diferentes que experimentan con los formatos aportando al espectador nuevas miradas y encuadres. Cámara en mano y 4:3 de pantalla, blanco y negro y una nueva proporción son el legado de este tercer día en Barcelona.
Tots els camins de Déu (España, 2014) [★★★★] supone el debut en solitario de la directora Gemma Ferraté quien ya dirigió un fragmento de Puzzled Love. El filme es una visión muy particular sobre los tres días que Judas, después de traicionar a Jesús, deambuló comido por los remordimientos antes de colgarse. Fábula, por tanto, sobre la culpa, adaptada a nuestros tiempos y que, con un exiguo presupuesto, consigue convertirse en un producto sólido de gran capacidad evocadora pese a una serie de bajones narrativos en su primer tercio. Toda una sorpresa de la factoría ESCAC, financiada vía crowdfunding, que fue recibida con una gran ovación de la platea. Sin duda, habrá que apuntar el nombre de su creadora.
Tras la esperada cuota de cine local del certamen, llegaba el turno del patriarca Garrel y sus dos hijos, Louis y Esther, quienes ya habíamos visto en el reparto de anteriores películas del festival. La jalousie (Francia, 2013) [★★] –cinta que ya reseñamos en la pasada entrega del Cineuropa de Santiago de Compostela— nos cuenta los celos y la fragilidad del amor personificado en una pareja de treintañeros. El principal aliciente del filme es su acertado reparto, conformado por Louis Garrel, Anna Mouglalis, Rebecca Covenant, Olga Milshtein y Esther Garrel. La cinta francesa, con fuertes influencias de la Nouvelle vague, presenta una trama mil veces vista pero que no deja de ser ligera y entretenida. A destacar la frescura y la naturalidad que aporta Olga Milshtein, la más joven el citado elenco.
El día terminó con O homen das multitudões (Brasil, 2014) [★★★], película brasileña que ha pasado recientemente por la Berlinale. Marcelo Gomes y Cao Guimaraes ofrecen una adaptación libre de la obra de Edgar Allan Poe El hombre de la multitud (1840) de lo más peculiar. El argumento nos presenta a Juvenal, un conductor de tren en Brasil que vive de forma solitaria y silenciosa en una ciudad llena de ruidos y multitudes. Con una extraña proporción de pantalla que parece la estampa de instantáneas verticales, los directores buscan nuevas perspectivas y parapetos donde observar ese movimiento casi pendular de las masas que se dirigen religiosamente cada día al mismo sitio. El largometraje funciona como una elegante reflexión sobre la sociedad actual masificada y tecnológica y la falta de relaciones interpersonales auténticas. Con un ritmo pausado y entrecortado el filme resulta incomodo por momentos, pero que premia al espectador más atento. Un tipo de cine que proyecta sensaciones que perduran en la memoria. En ésta aparecerán esos dos protagonistas, tan entrañables como incapaces de decirse algo sincero.
Ginebra Bricollé Nadal
enviada especial al Cinéma D'Autor de Barcelona 2014