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    Cine Club | Brokeback Mountain (2006)

    Brokeback Mountain

    DOS HOMBRES SIN DESTINO

    Brokeback Mountain | Ang Lee, 2006
    "Jack, I swear..." | Ennis del Mar.

         En Brokeback Mountain hay un arroyo que nunca desaparece. Fluye serpenteante a los pies de dos cowboys que buscan allí el cobijo y la autenticidad que se han negado, quizá de manera fortuita, a causa del corsé de una sociedad que condena sus preferencias sexuales, que acecha en la sombra a los supuestos invertidos o enfermos que se desean y se aman con fuerza inquebrantable, a pesar del dogma religioso y las cacerías que han sufrido y que sufren por no bailar al compás de esa América profunda. El arroyo fluye pacientemente bajo un cielo limpio salpicado de nubes, como un insólito póster con figuras de algodón. La naturaleza se enfrenta a la naturaleza y ellos pueden ser felices una o dos veces al año, cuando se sientan desprotegidos ante la nulidad de sus impostadas rutinas y no les quede más remedio que acudir a Brokeback Mountain, ese remanso de paz coloreado de azul y verde en Wyoming. Armados con sendos gorros de vaqueros, Ennis del Mar (Heath Ledger) y Jack Twist (Jake Gyllenhaal) cruzan sus miradas justo antes de entrar a la oficina de un poderoso ganadero llamado Joe Aguirre, quien les dará trabajo de cuidadores de un gran rebaño de ovejas que debe pastar cíclicamente en las montañas. Antes hemos visto a ese rubio serio bajarse de un camión que transitaba solitario por una carretera que parecía extenderse mucho más allá de lo que cubre el ángulo de visión de la cámara. Espera apoyado en la pared exterior de esa minúscula oficina prefabricada, mientras se acerca con lentitud una camioneta que frenará entre pistonetazos, sin aire o averiada sin más. De ella se baja el segundo en discordia, el moreno e insultantemente joven que acompañará a ese rubio cabizbajo.

         Escrita a cuatro manos por Larry McMurtry y Diana Ossana —a partir del relato de E. Annie Proulx— y dirigida por Ang Lee en 2005, Brokeback Mountain no es tanto una panorámica sobre la aridez moral en los territorios marginales como la constatación triste y demoledora de que hay puntos y aparte condenados a perdurar en el tiempo, acaso unos finales que no lo son porque jamás se llamaron así; de que se puede hablar del sentimiento más puro sin recurrir al sustantivo vacuo, a ese tópico del amor incorruptible que atraviesa cualquier fórmula predeterminada, pues al fin y al cabo esta película habla de todo eso con una pasión etéreamente vectorial. Remite a la mejor literatura, por su balsámico uso de la acción sin diálogo y la aparente sencillez técnica: cada pieza ocupa su lugar en el momento preciso, actuando en consecuencia a un relato conmovedor que escarba poco a poco en la piel de sus personajes. Así, cuando llega el momento de la primera despedida, ya formamos parte de una historia que girará dejándonos —a veces hechos polvo y otras levemente agradecidos— en la cuneta, pero que regresará a buscarnos para asistir a una suerte de triatlón cuyos participantes, llenos de costuras, se medirán a la más temible de sus pesadillas: la resignación a vivir sin vivir. La valentía es una apuesta demasiado alta para dos hombres que deciden quererse dentro de un paréntesis. La necesidad de liberación, como suele ocurrir fuera del cine, es un deseo quebrado en primera instancia y un veneno que carcome lentamente a todo aquel que lo prueba.

    Brokeback Mountain

    El versátil Ang Lee, director de obras tan dispares como Hulk y Deseo, Peligro, imparte magisterio a muchos niveles: no sólo ejecuta con minuciosidad, sino que potencia esa agonía elíptica que se dejaba entrever en el relato breve —ganador del Premio Pulitzer— de Annie Proulx. Los movimientos de cámara describen, e incluso expresan la interactuación de Ennis y Jack con su entorno mutable. Unas veces es hostil y vívido (cuando están separados); otras, acogedor y hermoso. Ennis se casa con una chica humilde (Michelle Williams) y tienen dos niñas. Jack hace lo propio con una joven adinerada (Anne Hathaway), cuyo padre es dueño de una empresa de tractores. Jack y Ennis cuentan los días para estar juntos. Jack es risueño, cariñoso, más espontáneo que Ennis, un tipo de aire melancólico y dicción pesada. Jack está comiendo con su familia el Día de Acción de Gracias, pero Papá le quita los cuchillos para trinchar el pavo y su hijo quiere comer al mismo tiempo que mira absorto el partido de la NFL que retransmiten por televisión. Y, por supuesto, se levanta para apagar el maldito trasto. Aunque Papá, tejano e idiota pertinaz, opina que ver fútbol es de hombres, así que se dirige a encender nuevamente la televisión para darle el gusto a su nieto. Y Jack estalla y le dice que esa es su casa, que allí manda él. “Siéntate, hijo de puta ignorante, o juro que te mataré a golpes”, sentencia con rabia. De repente, Papá se desinfla como un globo. Ha sido degradado a abuelo, sin más. La secuencia es memorable, dispara cartuchos de tensión hasta alcanzar el clímax soñado. Luego, cerca del final, hay otra escena en la que Ennis (sospecho que Heath Ledger habría alcanzado cotas estratosféricas) le dice a su hija que “cuando no tienes nada, no necesitas nada”. Quizá porque a él, parafraseando a William Munny, le han arrebatado todo lo que tiene, y todo lo que podría llegar a tener.

        En Brokeback Mountain hace frío durante las cuatro estaciones. De vez en cuando caen tormentas y graniza. Aun así, nada perturba su estática trémula. Hay un arroyo que desciende en busca de salidas y una hoguera que se extingue justo antes del amanecer. También un ligero rubor que genera el viento al rozar los árboles. La quietud es sobrecogedora, pero relajante. Allí arriba los días pasan rápido para que las noches duren más.

    Juan José Ontiveros
    redacción Madrid


    Estados Unidos, 2012. Título original: Brokeback Mountain. Director: Ang Lee. Guión: Larry McMurtry, Diana Ossana (Historia: E. Annie Proulx). Fotografía: Rodrigo Prieto. Música: Gustavo Santaolalla. Reparto: Heath Ledger, Jake Gyllenhaal, Anne Hathaway, Michelle Williams, Randy Quaid, Linda Cardellini, Anna Faris, Scott Michael Campbell, David Harbour, Kate Mara.


    Brokeback Mountain poster

    Brokeback Mountain Heath Ledger

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